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Cómo organizar la casa para que no se convierta en una leonera.

By 10:06 , ,

Las camisas se apilan en la silla, los calcetines mezclados con los juguetes, las zapatillas de deporte pisando los zapatos de tacón, las toallas mojadas sobre la cama, el collar de perlas encima del sillón mezclados con un montón de tikcets de compra del Corte inglés , la bolsa de deporte abierta en una esquina al lado de la escoba y el recogedor...
Bufff...
Es muy fácil que una casa se convierta en una leonera. Sobre todo si está habitada por varias personas, de distintas edades y necesidades y a unos les importa más que a otros el orden y la limpieza.




Cual es mi caso, poco importa, qué mas da!! Bueno sí importa...
 Sólo deciros que desde bien pequeña he sido ordenada y cuidadosa con mis juguetes, mis libros, mis papeles, mi ropa...
Siempre me ha gustado estar rodeada de cierto orden y limpieza y no comprendo al que le da igual vivir en algo parecido a un establo, con objetos, ropa, zapatos y cosas asomando por cada esquina y rodeados de... "mugre".
Sin caer en la obsesión, soy feliz viendo mi casa y mi entorno ordenado, la ropa doblada y bien planchada, con un toque de perfume, la cocina ordenada y limpia, los espejos siempre impecables, olor agradable en cada estancia de la casa y ambiente acogedor y ordenado, sensación de cuidado y limpieza.
Pienso que la vida se hace más fácil y agradable entre el orden y limpieza que... en una leonera.
En una casa ordenada, se facilita enormente la tarea de recoger y limpiar. Coser y cantar!!!




Desde los 18 años he tenido que aprender a organizar mi casa y mi entorno, buscando la forma de conseguir una casa cómoda, limpia y ordenada, lo cual no es nada fácil y menos para una niña de 18 años.
La experiencia y el equivocarse muchas veces dan como resultado... aprender. Ni más ni menos.
Hoy sé lo que debo hacer y presumo de organizarme bien, de ser una "curranta", eso sí, pero de las que se organiza y tiene tiempo para deporte y hobbies, además de su trabajo.





¿Cual es el secreto para organizar bien una casa, mantenerla limpia y armónica y que no falte de nada?
Pues el secreto está en... la libretita y el boli en el bolso, ni más ni menos.
Os parecerá una tontería, pero la experiencia me dice que... no lo es.
Las cosas que van surgiendo en la vida diaria, sean de mucha o poca importancia, se anotan en la libretita de tareas pendientes de resolver:
La persiana que se ha roto, el quitamanchas que debemos comprar, la tinta para la impresora, que no se nos olvide, las pilas del mando a distancia, las aspirinas...




Fundamental organizar todas y cada una de las habitaciones de la casa de la manera más sencilla y cómoda para mantenerlas ordenadas y limpias.
¿Cual es el secreto? Pues deshacernos de lo que no sirve, no nos gusta o entorpece seriamente nuestra tarea.
La casa debe ser un espacio cómodo, en el que sentirnos confortables y a gusto, sin cosas apiladas por las esquinas y cajones, que la mayoría de las veces no usamos y ni siquiera nos acordamos que tenemos.




Hay que reservar un día para organizar habitación por habitación, desde los cajones, hasta el armario, pasando por estanterías y repisas.
Debemos saber lo que tenemos en cada lugar y deshacernos sin pena de lo que no usamos y no hace más que ocupar sitio inútilmente.




La ropa y zapatos que ya no nos ponemos... en una caja y a Cáritas, Manos unida o a quién la necesite.
 Es tontería guardar y guardar sin sentido pensando que las modas son cíclicas y nos pondremos algo que ya no nos ponemos hace más de 4 años. 
Mi experiencia así lo dice y hay gente muy necesitada de ropa, creedme. Y no precisamente en África, sino, a la vuelta de la esquina.
Seamos generosos, compartamos algo de nuestra buena fortuna y... dejemos de almacenar y almacenar.
Primer mandamiento de la limpieza y el orden en una casa: "menos es más". Siempre.




Tenemos a nuestra disposición objetos que nos facilitarán enormente la tarea de ordenar.
Tiendas especializadas como Ikea, disponen de recipientes de plástico con tapa y ruedas o cajas de cartón y mimbre preciosas en las que podremos guardar mantas, toallas, ropa de camas, ropa de fuera de temporada, botas, etc... de distintos tamaños y formas.
Organizadores de corbatas, cinturones, complementos... que podremos colgar en las puertas de los armarios o colocar cómodamente en los cajones para tenerlo todo ordenado, limpio y bajo control.




Cuarto de baños y cocina merecen un capítulo aparte, pero sin agobios.
La tarea siempre es la misma. Abordar la situación, ponernos sin dejar para mañana lo que podemos hacer hoy.
Abrir cajón por cajón e ir guardando en una caja lo que ya no nos sirve, para regalarlo a quién sirva o tirarlo.




 A continuación, limpiar el cajón con agua jabonosa y un poquito de lejía o detergente y cuándo esté "como los chorros del oro"... colocamos adecuada y cómodamente lo que allí se va a quedar.
Si alguna caja tiene tapa y no vemos el contenido, resulta de utilidad ponerle etiquetas adhesivas para saber exactamente lo que contiene.
Los productos de limpieza siempre fuera del alcance de los más pequeños y las medicinas en recipiente cerrado, igualmente lejos de manitos inquietas...




Para llevar a buen término nuestra tarea y conseguir objetivos, es importante cuestión no "pegarnos el atracón" de orden y limpieza en el mismo día, sino poco a poco.
"Sin prisa, pero sin pausa" sería la clave.
En cuánto consigamos la ardua tarea de tener la casa como realmente queremos, lo más importante es el mantenimiento.
¿Cómo se consigue mantener lo que hemos logrado ?
Sencillo.
Concienciar a todos y cada uno de los habitantes del hogar de la importancia del orden y la limpieza. 
Dar a cada uno la tarea - misión del mantenimiento de una parte "del castillo" y "amenazar de muerte", con "la horca", el garrote vil", "la prisión incondicional sin fianza", el destierro", la "emigración" o la "tarjeta roja"... al que se le ocurra incumplir su parte.
Ja, ja, ja, ja, ja...
Os deseo mucha suerte!!!

P.D: -No guardar la revista de bodas de la Infanta Elena ( Ya se ha divorciado, por Dios).
        -No guardar el arroz de la boda de tu cuñada ( Sus hijos ya tienen bigote, por Dios)
        -No guardar el mechón de pelo de tu primer novio ( se ha casado con otra, tiene una barriga cervecera del quince y está más calvo que una bola de billar, por Dios)
       -No guardar el cuadro que te regaló tu cuñada (porque te produce pesadillas) y cuelgas cuándo viene y descuelgas cuándo se va...  (que le den, por Dios)


                                                         La quinta Estación: "Me muero por besarte".

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3 comentarios

  1. Maravilloso texto!! Me encanta leerte Mary Azucarillos :)

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  2. Nuevamente nada que objetar a tu artículo. Y sigo teniendo envidia de lo super claro que tienes todo. Un saludo amiga.

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  3. Me encanta seguir tus comentarios en tu blog. Siempre tan directa y didáctica. Saludos

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