Bienvenid@ a mi mundo !

He perdido un tornillo, que alguien me sujete...

By 22:02


Estoy valorando seriamente la idea de comprarme un perro.
¡Nunca pensé que estas palabras saldrían de mi boca!
Todavía miro a mi alrededor por si un tornillo flojo se me ha caído del cerebro.
Las casas con perro huelen a perro. Es una máxima que siempre he tenido clara y  no me vale : Fabuloso champú perruno, perfume para perros de extraordinaria calidad e higiene perril extra chupi. Las casas con perro huelen a perro.


                                                               Fotos: Chema.

Los perros ladran ( son perros, no van a piar), molestan a los vecinos y a los chavales cuándo tratan de estudiar.
Hay que bajarlos a que hagan pipí y ejercicio cuándo más cansados estamos, más cosas tenemos que hacer y menos nos apetece...
Como seres vivos que son, si tenemos mala suerte debemos aguantarnos si nos sale un "perro borde", o insoportable, o divo, o " como te acerques te meto un  mordisco que te vas a enterar", o "me encanta romperle las medias a las chicas del vecindario con mis garritas, que se fastidien!!!", o, le sale una piedra en el riñon y estoy más tiempo en el veterinario que en mi propia casa...


En fin. Sigo pensando lo mismo. Sobre todo en lo referente a que las casas con perro huelen a perro, impepinable!!! ( No me vale como excusa que algunos humanos huelen peor, y tanto... cierto!!!)
Nunca he podido elegir mi propia mascota.
He tenido canarios, tortugas, peces de acuario, grillos, asquerosos gusanos de seda ( por los que he tenido que escalar moreras subida en mis tacones...), un conejo enano ( el señor Mushu) y el agaporni Pipa ( que merece un capítulo aparte, porque es un personaje este mini loro).
Pero todo este amplio abanico de mascotas heredadas de mis hijas, a las que he cuidado, limpiado, aguantado, soportado, disfrutado y llevado de aquí para allá en mis viajes... nunca han sido mías. Ni una.


Las madres hacemos casi cualquier cosa por nuestros hijos, hasta lo que no debemos.
Y, en este caso, así ha sido.
Cuándo el señor Mushu ( conejillo) murió, lo pasé mal, al igual que todos los miembros de la familia.
Era muy bueno, simpático y querido en esta casa.
Pero no se me olvida lo mal que lo pasaba cada vez que tenía que limpiar su jaula. Armada de guantes hasta los codos, mascarilla tapando media cara, gafas...Me faltaba el gorro de quirófano y el mono azul con cremallera...
¡Qué asco! ¡Qué malos ratos!
Insisto, por un hijo, casi cualquier cosa.
Y, 8 años limpié al señor Mushu, ni uno más ni uno menos.


Debo cuidar bien a las mascotas heredadas de mis hijas, porque todas han sido longevas, hasta los peces, caramba!!!
Alguna amiga íntima que sabía de mis malos ratos con las mascotas heredadas sin ganas me ha dado drásticas soluciones entre risas... Nos hemos reído mucho!!!
Pero, la realidad, es que protesto mucho, pero mi respeto hacia los seres vivos es infinito.
No son objetos ni juguetes que se regalan por Reyes y en enero estamos hasta el moño y los podemos mandar a paseo...
Soy muy consciente de que cuándo tomamos la decisión de "aumentar la familia" es... con todas sus consecuencias.


Debo seguir mirando al suelo a mi alrededor por si encuentro ese tornillo flojo que se me ha caído del cerebro...
¿Dónde he dejado mi firmeza y mis convicciones?
¿Es que ya no recuerdo que las casas con perro huelen a perro?
¿Habéis oído hablar del "reloj biológico"? Seguro que sí.
Pues mi reloj biológico me pide perro. Niños no, Dios me libre, yo ya he cumplido, quita quita, qué horror, no quiero ver una sillita o un chupete ni en pintura!!!


Voy mirando a todos los perrillos que me cruzo y no me resisto a tocarlos, charlar con sus dueños y dueñas y acribillarlos a preguntas sobre la personalidad del perro, si ladra mucho o no, si se porta bien en casa, dónde lo adquirió y si le rompe las medias a las chicas del vecindario...
Este trastorno mío tiene que estar motivado por un "reloj biológico perruno" que me ha poseído irremediablemente.
Quizás sea de algo que he comido y me ha sentado mal. Quizás no debería asistir a tanta Cata de vinos...
¿Será un efecto secundario de mi nuevo aceite corporal?
Algo así debe ser...
Si mamá me oyese no daría crédito!!!
Ya os contaré cómo acaba esta historia. ¿Quién sabe? De mí espero ya...cualquier cosa.


                                                            Manu Tenorio:"Se me eriza la piel"


También te podría gustar

4 comentarios

  1. Antes de gastar tu dinero en comprar un perro, visita la perrera que hay muchos perros necesitados de adopción

    ResponderEliminar
  2. No compres, adopta, harás feliz a un animal el cual no habrá recibido cariño en su vida y el cual probablemente pase su vida encerrado en una jaula de alguna protectora o tenga sus días contados en la perrera, ellos también merecen una oportunidad.

    ResponderEliminar
  3. Es cierto , hacemos cualquier cosa por los hijos... y lo digo por esperiencia, tengo dos gatitos Por ellos...
    Si te decides, deberias hacer caso a Noelia, tiene mucha razón.

    Besitosss GUAPETONA.

    ResponderEliminar
  4. PIENSALO UN POCO, TAN SOLO POR SER UNA REPONSABILIDAD... PERO YO SIEMPRE SIGO MISS IMPULSOS Y SIEMPRE HAGO. JI! BUENO SOY PARA DECIR PIENSALO UN POCO... PERO ES BUENA OPCION ADOPTAR Y DAR UN HOGAR A UN PEQUEÑO DE CUATRO PATAS QUE LO NECESITA.. SEAR MUY AFORTUNADO DE ESTAR CONTIGO Y LO TUYOS

    ResponderEliminar